Soñé

martes, 31 de mayo de 2011



He perdido la cuenta de cuantos cigarrillos llevo ya esta noche.

Quizá el imaginarme un panorama diferente día a día me ha bloqueado la visión de lo que vivo realmente, y lo que he creado en mi mente. A veces me cuesta distinguir lo que es la realidad, lo tangible y aquella utopía que vivo alternamente.

Camino sintiendo el viento, el olor de la avenida, las gotas de sudor que recorren mi cuello, frente y demás piel, veo los rostros de la gente que camina a prisa, que busca llegar a tiempo a sus reuniones, comidas y demás encuentros, sin embargo yo solo camino, en muchas ocasiones sin darme cuenta a donde me dirijo, pues mis pies toman su propio rumbo sin preguntarme qué es lo que quiero o a donde quiero llegar.

Constantemente pienso que sentirme fuera, es lo que me hace sentir mejor. Puedo recorrer mis pensamientos, miedos, ideas, enojos, frustraciones y emociones más profundas y trascenderlas. No me importa el tiempo que me tome hacer esto, pues cada que lo logro, siento un peso menos dentro de mi cabeza, una voz más que calla mi mente.

Tenerlo a él, me ayuda a recordar que todo lo que ha sucedido es real, que nada ni nadie podrá herirme de nuevo, pues él se ha convertido en parte esencial de este cocktel de sueños, esperanzas, retos… de esta nueva vida.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Clap clap clap. recuerda esa noche, en la cual tus nubarrones grises poco a poco se fueron desvaneciendo, aclarando esa mente, por la cual tus sentimientos más profundos y bellos expresaron lo que en esta entrada expresa. Libera, crea, ESCRIBE.
BoB!